RUTA MAGÓN

Evergreen Cemetery
Ubicación

Evergreen Cemetery

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En la gaveta 16 del Cementerio Evergreen de la ciudad de Los Ángeles fueron depositados los restos de Ricardo Flores Magón el día primero de diciembre de 1922. Su hermano Enrique escribió sobre ese acontecimiento: “El día del funeral vino… El mal tiempo, la precipitación de los acontecimientos y sobre todo el miedo a los famoso catorce años en San Quintin (que ahora los regalan hasta por muestras de simpatía por los radicales) hizo que contados fuesen los extranjeros que viniesen (solamente [M.] Lerner, Mrs. Dwight, Mrs. [Miriam] Lerner y Mrs. [Mammie] Shea) y que los de habla española fuesen también pocos, relativamente, aparte de todos nuestros viejos compañeros. Por todos seríamos unas ciento cincuenta personas al ir a comenzar la marcha. […] una larga cola de unas dos cuadras y media de automóviles siguió al féretro. A las 3 pm del viernes 1 de dic., después de descansar el féretro en un catafalco improvisado, el número de concurrencia aumentado a unos 350, con los que ya esperaban en el panteón se dio comienzo a las honras fúnebres que consistieron en:

1. ‘El Hijo del pueblo’, cantado por toda la concurrencia, hombre, mujeres y niños, que rodeaban el cadáver que hacían guardia con gorros y franjas anchas de color rojo atravesando el pecho, con flores en la mano.
2. Discurso de la niña Isabelita R. Rangel, dicho con bastante sentimiento y buena dicción
3. Discursos en inglés por el compañero [Thomas Hastie] Bell, quien estuvo elocuentísimo y atrevido en sus conceptos
4. Oración fúnebre de F[ernando] Velarde
5. Cubierto por mí en español
6. Cubierto por Tere [Arteaga de Magón], quien habló bravamente y en forma tan correcta y espontánea, como nunca la había oído hablar
7. La Marsellesa por todos, cada quien en su idioma: español, inglés, yidish, ruso, polaco, italiano, etc.”

El cadaver permaneció en este lugar hasta el 5 de enero de 1923, día en que «Como se había anunciado, por el tren Sunset Limited, fue embarcado ayer a las 10 de la mañana, el cadáver del anarquista mexicano Ricardo Flores Magón, con destino a la ciudad de México, en virtud de las gestiones hecha por los elementos radicales mexicanos, para el objeto de hacerle los honores y efectuar su inhumación en la tierra donde el finado revolucionario viera la primera luz…, el secretario de relaciones, Pani, por conducto del cónsul en ésta, señor Leandro Garza Leal, se comunicó con la viuda de Flores Magón, dándoles cuenta de los acuerdos tomados y ofreciéndole un cheque de 500.00, a nombre del gobierno de Obregón; pero la señora rechazó honores y dinero diciendo: “Como mi finado esposo, soy también anarquista y detesto la ayuda de cualquier gobierno”»