ARTÍCULOS PERIODÍSTICOS

1918

El pesimista está derrotado. Aquel que creía irregenerable a esta vieja humanidad que parecía incapacitada para el bienestar y la libertad, admite ya que no en vano corre el tiempo, y que la experiencia, esa amable maestra, por más que las más de las veces sea cruel, ha fortalecido el cerebro de las masas y lo ha hecho pensar.

El pueblo, mejor dicho los pueblos, porque todos los pueblos de la tierra sienten y piensan de manera idéntica, en este momento de universal conmoción, se dan cuenta de los males que los afligen y echan a andar por el nuevo camino descubierto por la experiencia de la historia y la luz de la ciencia. Es un camino largo, cuya etapa principal se llama Anarquía, y adonde, quiérase o no se quiera, se encaminan los acontecimientos.

¿Qué es ese desconocimiento del papel histórico de los gobiernos, de regular la vida doméstica e internacional de los pueblos de que están dando muestras los huelguistas de Berlín y los rebeldes de Viena, los bolsheviki de Rusia y los obreros de Inglaterra, los antimilitaristas de Australia y los zapatistas de México?

Por grandes que sean nuestras ansias de ver derrumbarse de una vez este maldito edificio burgués, que a todos nos hace desgraciados, no podemos menos que congratularnos de los inmensos progresos que va marcando la evolución de los pueblos, gracias al sufrimiento, en virtud del castigo. Látigo necesitaban nuestros lomos de paquidermo para hacernos sentir nuestra humillación, y látigo y espuela estamos sintiendo. Sin el castigo, los pueblos no caminarían, no se encabritarían, no tendrían el valor de dar de vez en cuando una coz para derribar una corona y adquirir la piltrafa de un derecho.

Los pueblos comulgan con la psicología de la bestia: se conforman con comer y reproducirse. Tenga el pueblo un mendrugo y la bestia un puñado de paja, y pueblo y bestia se sentirán contentos; pero si el acicate hiere los ijares o la tiranía se extrema, pueblo y bestia se encabritan y libran sus lomos del jinete molesto, y de Díaz o Nicolás, de Huerta o de Kerensky. Por eso somos partidarios de los tiranos que a sí mismos se dan el título de “mano de hierro”. Nada mejor para abrir las puertas de la libertad que los tiranos que tienen “mano de hierro”. Los tiranos de manos suaves prolongan la esclavitud.

Los pueblos cansados, colmados, buscan su libertad, y todo estudiante atento de los acontecimientos diarios que se producen en todo el mundo, oye rechinar los goznes de las rejas que aprisionaban a los pueblos: en las trincheras se canta “La Internacional”, el viejo himno de Reclus[1] y Kropotkine, de Lorenzo y Bakounine. La rebeldía forza sus dedos en las disciplinadas falanges teutonas, como en las patrióticas huestes británicas. Es que el hombre, como la masa, es producto del ambiente, y en el ambiente no se respira más que este soplo: ¡rebelión!

Las clases directoras no deben quejarse de nadie más que de ellas, por los estupendos acontecimientos que se suceden en todo el mundo. El zapatista que sólo trabaja dos horas escasas para gozar de todas las comodidades que apetece un ser sano; el bolsheviki que cierra las puertas a la diplomacia histórica y despliega al viento su bandera de muerte para la propiedad privada; el obrero alemán que dice al Káiser: no trabajo mientras no se haga la paz; el obrero austriaco que escribe con su sangre en las calles de Viena estas palabras: ¡pan y libertad, el proletario inglés que en la bruma de Londres, o en medio del estruendo de Glasgow dice a sus amos: no más anexiones ni más indemnizaciones como costo de la guerra, y el descontento y la protesta de todos los pueblos de la Tierra no obran por su propio impulso, sino impulsados por la fuerza de las circunstancias porque a ello los han obligado la rapacidad del rico, la tiranía del gobernante y la hipocresía del ministro religioso.

Todos esos pueblos seguirían siendo mansas ovejas si a nuestros amos no se les hubiera ocurrido la más estúpida de las aventuras: la guerra europea, o hubieran acariciado los lomos de sus súbditos, en vez de exasperarlos con la explotación y la tiranía.

Los pueblos quieren la paz por sí mismos. Ya no se conforman con que diplomáticos de levita arreglen las relaciones de los pueblos entre sí, sino que ellos quieren ser parte principal cuando no absoluta, de sus propios destinos, y este paso adelante, este brinco mejor dicho, marca por sí solo una etapa en el desenvolvimiento de las asociaciones humanas. Por todo lo dicho titulamos este artículo: “Los primeros triunfos”, y auguramos, nos atrevemos a hacerlo, que los acontecimientos actuales y cien mil detalles de la manera de vivir de los pueblos arrojan a la humanidad hacia el amplio camino de la Anarquía, hacia la existencia de sociedades humanas que se rijan sin burgueses, sin gobernantes y sin ministros religiosos.

He aquí, hermanos proletarios, un ligerísimo resumen de los acontecimientos mundiales, de aquellos que indican con su sangre y con sacrificio las aspiraciones de los que sufren, de los que trabajan y de los que piensan.

Cada día obtiene un nuevo triunfo el espíritu progresivo de la especie humana sobre la vieja teoría de que los gobiernos son útiles a la humanidad; sobre la creencia de que el capitalismo es indispensable para el desarrollo y el progreso de los pueblos; sobre la creencia de que las religiones propagan la paz y la fraternidad entre los seres humanos.

Los gobiernos y los capitalistas hacen las guerras, empujan a los trabajadores de los distintos pueblos a exterminarse los unos a los otros, para el provecho personal de un reducido número de parásitos, y los ministros de las religiones abren de antemano las puertas del cielo a aquellos que con mejor éxito abran el vientre de sus hermanos de cadenas.

Hermanos: el día de la fraternidad universal está cerca, y estará más cercano si todos procuramos, de alguna manera, dar vida a la prensa que nos dice la verdad. No seamos tacaños, y así como unos ponemos en peligro nuestra tranquilidad y comprometemos sin regateos nuestra libertad, que los demás abran los bolsillos para sostener en pie las hojas valientes, como Regeneración, que no miden el peligro y que desafía las iras del enemigo.

¡Viva Tierra y Libertad!

 

Ricardo Flores Magón


1 Refiérese a Eliseo Reclus. Geógrafo y anarquista. Amigo tanto de Miguel Bakunin como de Pedro Kropotkin, tomó parte junto con su hermano Elie (1827-1904) en la Comuna de París de 1871. Fue uno de los más respetados teóricos y escritores anarquistas. Escribió prefacios a Dios y el Estado de Bakunin (junto con el anarquista italiano Carlo Cafiero) y Palabras de un Rebelde y La conquista del pan de Kropotkin, para los que sugirió el título. Sus panfletos Evolución y revolución (1880) y Un anarquista habla sobre la Anarquía (1884) fueron traducidos a muchos lenguas. Geógrafo de renombre internacional, publicó entre otros trabajos los 19 volúmenes de su Nueva geografía universal (1876-1914) y sus seis volúmenes de El Hombre y la tierra (1905-1908).

Mientras Regeneración no ha podido hacer oír su voz por falta de elementos pecuniarios,1 el enemigo común no ha dormido. Si los trabajadores se han desentendido de contribuir a la publicación de esta hoja de combate, cuya vida es necesarísima en estos momentos de general angustia, siquiera para tener siempre encendida ante las masas que sufren, una luz que guíe sus pasos inciertos, el enemigo ha estado alerta, el enemigo no ha dormido y en su demencia de desembarazarse de los hombres que de alguna manera pueden poner en peligro las instituciones burguesas, ha llenado los presidios de espíritus altivos, de hermanos nuestros, cuyo delito ha sido decir al que sufre: tienes derecho a vivir sin ser explotado, sin ser mandado y sin ser embaucado.

En los presidios texanos yacen olvidados Rangel, Cisneros2 y demás héroes de la justa querella que tenemos los de abajo contra los de arriba: Jesús Rincón, el hombre que se atrevió a desafiar la ley del servicio militar obligatorio,3 ve transcurrir los monótonos días del cautivo, sin que haya una mano amiga que se acerque a estrechar la suya para decirle siquiera que tiene compañeros y cuenta con hermanos; Tomás Farrel Cordero, el compañero que en defensa de su vida y de nuestros grandes principios hizo sentir a un esbirro de uniforme el filo de su puñal,4 vive olvidado en el presidio sin una voz que le diga que el corazón oprimido late en simpatía con él; Tresca,5 Azuara6 y una infinidad de trabajadores de la organización I.W.W., esperan solidaridad de sus hermanos de clase en los presidios de este país, y miles de hombres y de mujeres de corazón bien puesto, esperan en sus calabozos adonde los tiene encadenados la tiranía, que el pueblo despierte, que el pueblo vea en su martirio un ejemplo de cómo abusan los gobiernos cuando las masas no saben ser altivas y viriles.

La mansedumbre de las masas ha dado como resultado el ensoberbecimiento de los que oprimen. Pueblo que no protesta, pueblo que no se vuelve airado contra la injusticia, es pueblo destinado a ser esclavo y a nadie debe culpar de la vergüenza de arrastrar cadenas, más que a él mismo.

Un pueblo que comprendiera lo que es justicia, nunca habría permitido que Emma Goldman y Alexander Berkman hubieran sido procesados por predicar doctrinas de paz y de fraternidad entre todos los seres humanos que pueblan el mundo;7 pero aquí lo hemos permitido, y por eso todos los días se abren las puertas de los presidios para alojar detrás de ellas a los mejores de nuestros hermanos.

Raúl Palma8 es una de las últimas víctimas del encono, del odio que nos tienen los que mandan. Este joven luchador se encuentra preso porque la policía local dice que ejecutó a un burgués que por añadidura era polizonte, el 13 de julio de 1916. La acusación es absolutamente falsa, y si Raúl Palma está preso es porque este compañero se mostró siempre activo propagandista de nuestros ideales.

Raúl Palma es un joven propagandista de nuestros principios. Desde que era casi un niño, Palma entró de lleno a la lucha distinguiéndose aquí, en la ciudad de Los Ángeles, por su talento y por su fácil palabra. Él era uno de los que más se significaron como agitadores de la clase trabajadora. De ahí viene el odio que le profesan todos aquellos que quieren que no cambien las condiciones que actualmente existen y en las cuales encuentran una garantía para la explotación, el engaño y la opresión.

El que oprime, el que engaña y el que explota, nunca puede ver con buenos ojos al proletario que enseña a sus hermanos de clase cuál es el camino que debemos tomar los oprimidos para emanciparnos.

Dos veces, antes de ahora, Palma ha estado  preso por predicar en la plaza pública nuestros ideales. Para la burguesía es un hombre peligroso, y es natural que ahora se pretenda eliminarlo de entre los vivos acumulándole un delito por el que la ley burguesa castiga con la horca.

Eso es lo natural, que nuestros opresores traten de arrebatar de entre nosotros a aquellos elementos que puedan abrirnos los ojos, a aquellos abnegados que arriesgan tranquilidad, libertad y vida por educarnos; eso es natural, porque los que nos oprimen tienen deseos de que se perpetúe este sistema que hace posible que unos cuantos gocen de todos los placeres de la vida sin hacer nada útil, mientras la gran mayoría de seres humanos sudan y sufren por conseguir un duro mendrugo.

Pero lo que es natural es que nosotros mismos, los que sufrimos, veamos con indiferencia estos casos y permitamos que se arrebaten de nuestro seno a los mejores de los nuestros, y es por eso por lo que excitamos a todos los trabajadores a que levanten su voz y vacíen sus bolsillos para defender a los nuestros.

Palma, si no nos apresuramos a salir en su defensa, será ahorcado, como fue ejecutado Joe Hill.9 La burguesía nunca perdonará a Palma su actividad en la propaganda de nuestros ideales; la burguesía no se siente tranquila con la libertad de un luchador  como Palma, y hará todo lo que esté de su parte por hacerlo desaparecer.

La vida de este compañero está en nuestras manos, hermanos de miseria y de explotación. El jurado que debe  juzgarlo está próximo, y si nos apresuramos a salvarlo, perecerá esta víctima de nuestra indiferencia y de nuestra maldad porque maldad es no levantar a los nuestros, a los que son sangre de nuestra sangre y carne de nuestra carne, cuando nuestro enemigo los derriba en tierra.

El jurado de Palma tendrá lugar el 18 del próximo marzo.

Envíense contribuciones para la defensa de Raúl Palma a esta oficina. A obrar en seguida. Cada minuto que pasa es un momento que acerca el instante en que la mano del verdugo deba caer sobre el cuello de un joven luchador digno del apoyo decidido de todos los trabajadores, de todos los que sufren, de todos aquellos por quienes él luchó mientras estuvo libre, y a quienes ahora corresponde demostrar su simpatía y su solidaridad para el caído.

Si no nos dolemos de los nuestros; si no damos la mano al caído, nunca nos libertaremos de la injusticia, seremos siempre esclavos.

 

Ricardo Flores Magón


1 Refiérese a la suspensión temporal de Regeneración, del 6 de octubre de 1917, fecha del número 261, al 9 de febrero de 1918, fecha del número, 262.

2 Refiérese a José Abraham Cisneros. Residente de San Gabriel, California (1911-1913). Miembro del Grupo Regeneración de San Gabriel fundado en febrero de 1911. En su casa se celebró la primera reunión del grupo. En marzo de 1911, con otros miembros de este grupo, se adhirió a la  postura del PLM que proclamaba que Francisco I. Madero era un traidor a la causa de la libertad, a raíz de la detención de Prisciliano G. Silva, por las fuerzas maderistas en Guadalupe, Chihuahua. Participó en la campaña de recolección de fondos para la defensa de León Cárdenas el Niño Mártir. En noviembre de 1912, también con otros compañeros del grupo de San Gabriel, se deslindó de Rafael R. Palacios, a quien acusó de intentar sabotear a Regeneración. Envió numerosas aportaciones económicas para el órgano del PLM. Uno de los Mártires de Texas, a fines de 1923 estaba todavía en la prisión Wynne State Farm, Huntersville, Texas.

3 Ver “Zarpazos”, Regeneración, núm. 257, 23 de junio de 1917.

4 Ver “Un caído”, Regeneración, núm. 257, 23 de junio de 1917.

5 Carlo Tresca (1879-1943). Italiano. Periodista y ferrocarrilero. Fue secretario de la Unión de Trabajadores del Ferrocarril italiano y editor del periódico Il Germe. Con el fin de evitar una condena por sus actividades políticas, emigró a los Estados Unidos en 1904. En Filadelfia asumió la redacción de Il Proletario, órgano oficial de la Federación Socialista Italiana. Sus ideas cada vez más cercanas al anarquismo lo llevaron a renunciar, en 1906, a la publicación de su periódico La Plebe. En 1908, se estableció Pittsburgh, y desarrolló un intenso trabajo de propaganda entre los obreros y mineros del carbón italianos del oeste de Pennsylvania, lo que le provocó numerosas multas, encarcelamientos e inclusive un intento de asesinato. A partir de mayo de 1911 publicó diversos artículos a favor del PLM, en L’Avvenire de New Kensignton, Pennsylvania, a pesar de tener viejas diferencias con el redactor de la sección italiana de Regeneración, Ludovico Caminita, quien se negó, tras el arresto de Tresca ese mismo año, a hacerse cargo de L’Avvenire, por diferencias con Tresca a quien acusó de apoyar a miembros de la colonia italiana, comerciantes y burgueses, y de chantajista, etc., lo que los llevó a la ruptura. En 1912, invitado por los IWW a Lawrence, Massachusetts, realizó una campaña entre los trabajadores italianos en busca de la libertad para los líderes huelguistas Joseph Ettor y Arturo Giovannitti, acusados falsamente de asesinato. Tresca continuó su labor de agitación en las huelgas de los trabajadores textiles en Little Falls en Nueva York (1912), de los trabajadores de los hoteles de Nueva York (1913), de los trabajadores de la seda en Paterson, Nueva Jersey (1913), entre otras. Para 1916, Tresca reanudó la relación con los editores de Regeneración. Participó el 18 de marzo de ese año, como orador en un Mitin internacional, llevado al cabo en el Labor Temple, “para protestar contra la persecución de que son víctimas los luchadores anarquista Ricardo y Enrique Flores Magón”. En julio, Tresca, junto con  F. H. Little y Schmit y otros siete wobblies fue arrestado, por su participación en la huelga de los mineros en Mesabi Range en Minnesota. En este último lugar escapó de un intento de linchamiento pero fue acusado de asesinato “como resultado de un choque armado habido entre mineros huelguistas y una fuerza de esbirros en Biwabick, en el cual resultaron dos hombres muertos”. El juicio se llevó a cabo en diciembre de 1916. En Los Ángeles se organizó un mitin internacional, el 3 de diciembre “a favor de los hermanos Magón, Tresca, Rangel, Schmidt, Caplan y tantos más perseguidos en esta nación por la hidra capitalista”. Ricardo Flores Magón fue el orador en español. En su discurso “La rusia americana” le llamó “generoso poeta”. Para no interceder por él, el gobierno de Italia, acusaba a Tresca de ser espía alemán. Fue declarado inocente y liberado, para meses después ser de nueva cuenta encarcelado, junto con la Gurley Flynn, Giovanniti, Hayword y más de 160 wobblies. A lo largo del resto de su vida fue un activo opositor al fascismo, el estalinismo y a la infiltración de la mafia en los sindicatos norteamericanos. Fue asesinado por esta última en la ciudad de Nueva York, el 11 de enero de 1943.

6 Refiérese a A. V. Azuara. Minero de Morenci, Arizona. Detenido tras la disolución de un mitin que se celebró el domingo 29 de agosto en Morenci. El acto organizado por los IWW fue atacado por “polizontes” de la Mesa Directiva de la Local N. 2 de la Arizona Federation of Labor. Tras una trifulca entre los mineros anarquistas y los esquiroles, Benigno Medina y A. V. Azuara fueron detenidos y acusados del delito de “hablar contra las malditas instituciones burguesas”. Se les recluyó en Clifton y se les fijó una fianza de cinco mil dólares a cada uno. Unos días después E. J. Moreno, organizador de la Arizona Federation of Labor mató en Newtown, cerca de Morenci, a Federico Bosques, cuando este orador obrero dirigía la palabra a los trabajadores denunciando a la Mesa Directiva de la Local No. 2, como traidora a los intereses de la clase trabajadora, por haber ocasionado el arresto de Medina y Azuara.

7 Ver  “Zarpazos”, Regeneración, núm. 257, 23 de junio de 1917.

8 Raúl Palma. Miembro del PLM. Compañero de Lucía Norman. Propagandista entre la comunidad mexicana en Los Ángeles, California. Fue arrestado en mayo de 1917,  por “repartir propaganda anarquista e incitar a una manifestación armada contra el orden”. Las autoridades buscaron su deportación. En diciembre, fue acusado del asesinato de un tendero anglosajón. En julio de 1917, junto con Odilón Luna, lo iban a deportar por propaganda subversiva. Ricardo Flores Magón organizó un comité de defensa a su favor. La oposición de Enrique Flores Magón y Ralph García a dicha defensa devino en rompimiento definitivo dentro del grupo de Regeneración. Fue declarado inocente tras un juicio celebrado en mayo de 1918. En julio de ese mismo año volvió a prisión, esta vez acusado de violación del Acta de Espionaje, por su participación en el Comité Internacional para la Defensa de Ricardo Flores Magón y Librado Rivera, junto con María Brousse, Epigmenio Zavala, Nicholas Zenn Zogg.

9 Joel Emmanuel Hägglund (1879-1915). Músico y sindicalista nacido en Gästrikland, Suecia. Migró a los Estados Unidos en 1902, donde adquirió el nombre de Joe Hill. Utilizó la música como método de lucha y compuso numerosas canciones e himnos de lucha; entre las más memorables están “The Tramp”, “There is Power in the Union” y “Rebel Girl”. Participó en la incursión pelemista de la Baja California en 1911, animando a los combatientes con su música. El 19 de noviembre de 1915 fue fusilado en cumplimiento de la sentencia de muerte dictada tras un juicio amañado, en que se acusó del asesinato de un carnicero con la única evidencia de que el día del crimen Hill había sufrido una herida de bala, causada por una disputa amorosa, que Hill se negó a utilizar como coartada.

Por fin, la Corte de Apelaciones de San Francisco, el día 4 de este mes; dispuso que seamos llevados a la prisión de McNeil Island, Enrique y yo.1

El fallo del Juez Trippet2 fue confirmado en todas sus partes.

Era natural que así sucediera. Nuestra presencia fuera de las rejas de la prisión, no es grata a los que oprimen, a los que explotan y a los miembros que embaucan.

Un agitador en la calle, como Raúl Palma, o como nosotros, inquieta a nuestros  opresores. El burgués y el tirano sólo están tranquilos cuando hombres de nuestro temperamento están muertos o encerrados en un calabozo, que es casi lo mismo o peor que estar muertos.

Por meses hemos solicitado la solidaridad de nuestros compañeros de ideas y nuestros hermanos de clase; pero el resultado ha sido mezquino, a pesar de los esfuerzos de buenos amigos que se han quitado el pan de la boca y han disminuido la ración de su prole y de su familia para ayudarnos a conseguir unos cuantos centenares de dólares que necesitamos para gozar por algún tiempo más de la relativa libertad que nos ofrece el sistema actual. No tenemos lo necesario para pagar los gastos de la apelación a la Suprema Corte, que es nuestro último recurso, y entraremos de nuevo al presidio porque así lo quieren los trabajadores a quienes defendemos y educamos.

Si nuestros hermanos de clase se apresuran en ayudarnos con fondos para nuestra defensa, todavía podremos estar libres unos meses más, y quién sabe si hasta no volvamos a pisar el patio de los convictos; pero todo depende de la generosidad y liberalidad de nuestros amigos y de los trabajadores en general.

Háganse colectas para nuestra defensa por aquellos que creen que nuestra estancia fuera de la prisión es más útil a la causa de la libertad, que nuestra estancia en el presidio.

 

Ricardo Flores Magón


1 Ver “Nuestro proceso”, Regeneración, núm. 256, 21 de abril de 1917, y “La apelación” Regeneración, núm. 257, 23 de julio de 1917.

2 Refiérese a Oscar B. Trippet. Juez de la Corte Federal de los Estados Unidos en Los Ángeles. En febrero de 1916 dictó la orden de arresto contra Ricardo y Enrique Flores Magón; se encargó de su proceso y sentenció a Ricardo a un año y un día de prisión y una multa de mil dólares, y a Enrique a tres años de cárcel y tres mil dólares de multa, argumentado que con sus escritos publicados en Regeneración provocaban la guerra entre México y los Estados Unidos.

La apelación de estos dos batalladores camaradas,1 fue desechada por la Suprema Corte que falló en el sentido de que es constitucional la ley del servicio militar obligatorio. En consecuencia, Emma Goldman y Alexander Berkman, que tan valerosamente han luchado por la paz universal, tendrán que cumplir sus condenas en las penitenciarías de Jefferson y Atlanta, respectivamente.

Pero el gobierno americano no contaba con la solidaridad universal de los trabajadores. Creía sin duda que el proletariado iba a presenciar indiferente el encarcelamiento de Emma y Alexander, y su error ha sido estruendoso, pues el proletariado ruso, indignado, exige de este gobierno la libertad ya no sólo de estos dos camaradas, sino que también la de Thomas J. Mooney y demás mártires de San Francisco.

Los anarquistas de Petrogrado pretenden apoderarse de la persona del embajador americano, Francis, y tenerlo en rehenes hasta que nuestros camaradas sean libertados.

He aquí cómo los pueblos comienzan a tomar en sus propias manos la defensa de sus intereses.

Esto indica que dentro de poco tiempo, ya no serán los gobiernos quienes manden sino los pueblos.

El sol de la anarquía asciende en el horizonte. Ciegos los que no lo vean.

 

Ricardo Flores Magón


1 Ver “Zarpazos,” Regeneración, núm. 257, 23 de junio de 1917.

Los compañeros José Flores,1 Trinidad Villarreal,2 Rafael B. García3 y Teresa4 y Enrique Flores Magón, se han separado del Grupo Editor de Regeneración, por no haber sido posible llegar a entenderse ellos y los que quedamos al frente del Grupo, en algunos detalles de la lucha.

Los compañeros que salieron no van a abandonar la lucha por nuestros caros ideales anarquistas, sino que tienen el firme propósito de continuarla en la medida de sus fuerzas y posibilidades.

Los que quedamos al frente del Grupo, que somos Librado Rivera,5 María B. Magón6 y el que estas líneas escribe, tenemos igualmente el firme propósito de continuar como hasta aquí, firmes y resueltos a desafiar las iras de los opresores de toda laya: gobernantes, burgueses y clérigos.

Regeneración continuará siendo el portavoz de los oprimidos; Regeneración continuará siendo el defensor del caído.

Venciendo serias dificultades económicas y de otro orden, hemos logrado publicar este número, y esperamos que todos nuestros camaradas y trabajadores en general, tomarán empeño en que no desaparezca esta hoja de combate que ha sabido permanecer de pie a pesar de todos los obstáculos, de todas las amenazas y de todas las persecuciones.

Enviad pronto vuestro óbolo, compañeros, para que salga otro número lo más pronto posible.

Este es el momento más oportuno para orientar el criterio de los trabajadores, porque la sociedad caduca se desquicia, y es preciso estar alerta para que no vaya a surgir de sus ruinas un nuevo orden social que, como el actual, tenga como base el infortunio de los que producen.

No, compañeros, no nos durmamos. Ya que la vieja sociedad se desquicia, tengamos a la mano los materiales necesarios para la construcción de la nueva, que debe estar basada en la igualdad económica, política y social de todos los seres humanos.

El material indispensable para la construcción del orden social que aspiramos los anarquistas, es la consciencia que todo hombre y toda mujer deben tener, de su derecho a vivir sin explotar y sin ser explotados, sin mandar y sin ser mandados.

A hacer consciencia, camaradas, y para ello, a sostener a Regeneración: pero hay que hacerlo pronto, que ya están cayendo los primeros sillares del negro edificio cuyo peso nos asfixia.

De hoy en adelante, toda correspondencia y dinero para Regeneración, deben ser enviados a mi nombre con la dirección de siempre, P. O. Box 1236, Los Ángeles, Cal.

 

Ricardo Flores Magón


1 José Flores. Los Ángeles, California (1913-1918). Miembro del grupo «Armonía y Solidaridad», del Centro de Estudios Racionales y del grupo editorial de Regeneración (1915-1918).  Firmó la Protesta contra el gobierno de Argentina por la represión a los grupos libertarios del 5 de enero de 1913. Suscribió la carta en contra de Rafael Romero Palacios del 25 de febrero de 1914. Firmó el manifiesto «A los trabajadores del Mundo”, suscrito el 19 de diciembre de 1915 por un centenar de residentes de Los Ángeles, en contra de lo publicado por El Porvenir del Obrero de Mahón, España, el 14 de octubre de ese mismo año, sobre una supuesta compra de terreno por los miembros de la JOPLM. Así como el llamado «A los IWW», emitido el 10 de mayo de 1916, para rechazar lo asentado en El Rebelde, órgano del Local 602 de esa organización obrera. José Flores, junto con Enrique Flores Magón, Trinidad Villarreal, Rafael Brousse García y Teresa Brousse, se separó del grupo editor de Regeneración en febrero de 1918 «por no haber sido posible llegar a entenderse  ellos y los que quedamos al frente del Grupo, en algunos detalles de la lucha» a decir de Ricardo Flores Magón .

2 Trinidad Villarreal. Miembro del último grupo editor de Regeneración. Entre 1907 y 1913 participó en la organización de varios grupos ligados al Partido Liberal Mexicano, como el Club Liberal “Santos Degollado” de Metcalf, Arizona (diciembre de 1907); el Grupo Regeneración de Hico, Texas (enero de 1911), y el Grupo Regeneración “Praxedis Guerrero” de Tumco, California (febrero de 1911). En febrero y marzo de 1913 firmó varias protestas y manifiestos como miembro de la Casa del Obrero Internacional de Los Ángeles, California. En mayo de este año fue fundador del Grupo Regeneración “Los Rebeldes” de Los Ángeles, California, cuyo secretario era Odilón Luna. A mediados de 1913, Trinidad Villarreal, junto con Blas Lara y William Owen, luchaba por la libertad de los hermanos Flores Magón, Librado Rivera y Anselmo I. Figueroa, presos en McNeil Island. En diciembre de 1915, era uno de los cinco miembros del grupo editor de Regeneración —los otros cuatro eran: los hermanos Ricardo y Enrique Flores Magón y Librado Rivera y José Flores. Los cinco vivían en una comuna en los Ángeles, donde labraban cinco acres de tierra y donde, además de sus habitaciones, se localizaba la imprenta y las oficinas del periódico. En febrero de 1918, el grupo se dividió: por una lado quedaron Ricardo, María Brousse y Librado Rivera y por el otro José Flores, Rafael B. García, Enrique Flores Magón y Trinidad Villarreal.

3 Probable referencia a Rafael Brousse García. Anarquista, residente en Los Ángeles, California. Participó en la redacción del Regeneración de 1915 a 1917. Con Enrique Flores Magón, Trinidad Villarreal y Teresa Brousse de Magón, formó el grupo Adelante en enero de 1918, tras su ruptura con Ricardo Flores Magón. En 1923 emigró a México y se vinculó a los grupos obreros y anarquistas del país.

4 Refiérese a Teresa Brousse de Magón. Prima hermana de María Brousse, pareja de Ricardo Flores Magón. Se casó con Enrique Flores Magón, con quien procreó un hijo nacido el 17 de marzo de 1917. Escribió una semblanza de Margarita F. Magón, la madre de Ricardo y Enrique, publicada en Regeneración el 18 de marzo de 1916. Por esta época estuvo muy activa en la defensa de los presos liberales en los Estados Unidos. En febrero de 1918, junto a Enrique, Rafael B. García, José Flores y Trinidad Villareal, se separó del grupo editor de Regeneración. A decir de Nicolás T. Bernal, las intrigas de Teresa fueron factor clave en la ruptura entre los hermanos Magón.

5 Librado Rivera (1864-1932). Originario de Aguacatillos, San Luis Potosí. Educado por el liberal espiritista y profesor Jesús Sáenz y el pastor metodista Hexiquio Forcada. Profesor normalista y periodista. Participó en el Primer Congreso Liberal de 1901, como miembro del Club Ponciano Arriaga de esa ciudad. Cuando era secretario del club, fue encarcelado junto con Juan Sarabia y Camilo Arriaga en enero de 1902. Con ellos y en la cárcel fundó El Demófilo. En agosto se trasladó a México y colaboró en El Hijo del Ahuizote. Aprehendido junto con Ricardo Flores Magón y los demás redactores el 16 de abril, salió de nueva cuenta de Belem y pasó a la clandestinidad al emigrar con sus compañeros a Estados Unidos. Siguió el periplo de aquellos por las ciudades de Laredo y San Antonio, Texas y Saint Louis. Al formarse la JOPLM, el 28 de septiembre de 1905, fue nombrado primer vocal. Un año después, el 12 septiembre de 1906 fue aprehendido junto con Aarón López Manzano a petición del empresario William Greene. Al frustrarse el intento de llevarlo clandestinamente a México, fue liberado a fines de noviembre. A mediados de 1907, se reunió con Ricardo Flores Magón y Antonio I. Villarreal en la ciudad de Los Ángeles. Fue aprehendido junto con Enrique y Ricardo Flores Magón el 23 de agosto de 1907. Sentenciado por violación de las leyes de neutralidad, permaneció en la penitenciaría de Florence, Arizona, hasta agosto de 1910. En 1911 fue nuevamente arrestado bajo la misma acusación y pasó a la cárcel de McNeil, Washington, junto con Enrique, Ricardo y Anselmo L. Figueroa. Libre en 1914, regresó a Los Ángeles y se reincorporó a la redacción de Regeneración. Permaneció a lado de Ricardo cuando el grupo se dividió en 1917 y firmó junto con él el manifiesto “a los Trabajadores del Mundo”, de marzo de 1918, por lo que fue acusado de infringir las leyes de espionaje vigentes durante la Primera Guerra Mundial. Fue enviado junto con Ricardo a la penitenciaría de Leavenworth, Kansas, a purgar una condena de 15 años. Salió libre el 6 de octubre de 1923, al conmutársele su pena por la deportación. De regreso en México, organizó el grupo “Tierra y Libertad” en su natal San Luis Potosí. Publicó Sagitario, órgano del grupo Hermanos Rojos. En 1928, desde Doña Cecilia (hoy Ciudad Madero), publicó Avante, periódico suprimido por el gobierno estatal. En 1931 publicó ¡Paso! en la ciudad de México, como órgano del grupo Ideas y Acción. Murió por atropellamiento al año siguiente.

6 María Brousse Magón. Pareja de Ricardo Flores Magón. Los Ángeles, Santa Ana y Oakland, California (1906-1918). Oriunda de Ensenada, Baja California. Fue miembro del Partido Socialista Internacional. Al unirse a Ricardo ya tenía una hija, Lucía Norman, quien también se unió al PLM. Su hermana Teresa Brousse fue compañera de Enrique Flores Magón. Aunque nunca estuvo casada con Ricardo, firmaba como María B. Magón. Fue una elocuente oradora y, como tal, participó en muchos mítines organizados por el PLM en La Plaza de Los Ángeles (La Placita) y en otros lugares. En marzo de 1906 María B. de Talavera formaba parte del Club Liberal “Reforma, Libertad y Justicia” de Los Ángeles. Este Grupo, en el que también participaba Modesto Díaz, editaba el periódico El Mosquito. La correspondencia entre María Brousse y Ricardo se inició aproximadamente en julio de 1906. En mayo de 1907, Ricardo dio la dirección de María Brousse para recibir la correspondencia de Pío Araujo y Tomás Sarabia. A María Brousse se le menciona por primera vez en Regeneración en el artículo “La mujer acude a nuestras filas”, en el que destaca su participación en un mitin para denunciar el secuestro de Manuel Sarabia en julio 1907. “En esta ciudad, en la manifestación celebrada á principios del corriente para denunciar el plagio de Manuel Sarabia, la Señora B. de Talavera, que de antaño se ha distinguido por sus ideales levantados, pronunció un discurso que fue un himno vibrante y soberbio contra los tiranos. Su palabra elocuente y fascinadora aún repercute en nuestros oídos, aún nos conmueve, vive en nuestros recuerdos como algo que nos es grato, muy grato, como uno de esos sucesos que nos place traer á la memoria porque nos causó honda impresión, porque nos halagó, porque nos hizo gozar intensamente.” En agosto de 1907, durante el encarcelamiento de Ricardo, María Brousse, quien ya es su compañera, y su hija Lucía, paseaban frente a la cárcel para que el preso pudiera verlas desde su celda. En junio de 1908, María Brousse consiguió sacar subrepticiamente de la cárcel en que se encontraba preso Ricardo los planes para la insurrección de 1908 durante una visita que le hizo a su compañero. Un mes antes, Enrique C. Creel había solicitado al gobierno de los Estados Unidos que “María Talavera” y otros 12 liberales fueran investigados por violación a las leyes de neutralidad, acusándolos de comprar armas y preparar la insurrección de 1908. En una carta al Secretario de Relaciones Exteriores, Ignacio Mariscal, Creel le anunció que “muy probablemente aprehenderán próximamente Enrique Magón, Praxedis Guerrero, Mario [a] Talavera, Onésimo Galindo, Refugio Rentería, Gutiérrez Lara, Justo Ávalos, Benigno Vázquez, Rómulo Carmona y otros de importancia, usando acusación de Agente especial enviado por Departamento Justicia este país. Para evitar que aparezca México, tengo trabajando dos agentes pago moderado y necesitase fotografiar correspondencia Jefes recogiendo placas. Suplico autorización. Dirigí igual telegrama a Relaciones”. En esta época, María y Ricardo se enviaban recados y correspondencia ocultos en la ropa que ella sacaba de la prisión para lavarla. Esta correspondencia fue descubierta por las autoridades de la prisión y remitida al consulado mexicano y sus espías. Tras la nueva detención de Ricardo y Enrique Flores Magón, Librado Rivera y Anselmo L. Figueroa, en junio de 1911, un grupo de mujeres cercanas a los dirigentes de la JOPLM (entre las que se encuentran María Brousse y Lucía Norman) integraron un grupo para participar en la defensa de sus compañeros y signaron un texto publicado en Regeneración en el que afirmaban: “Somos mujeres proletarias que vivimos dé nuestro trabajo explotado por la maldita burguesía. Somos mujeres mexicanas que vemos en el Programa del Partido Liberal Mexicano la redención de los esclavos de México. Somos mujeres mexicanas que hemos comprendido que la mujer debe luchar al lado del hombre para romper para siempre la cadena del Capital, que á hombres y á mujeres hace desgraciados. Somos mujeres; pero estamos listas á cualquier sacrificio. Somos mujeres; pero tenemos más valor que los hombres que en estos momentos de prueba para nuestros hermanos de la Junta, esconden el cuerpo y se ocultan cuando debieran mostrarse desafiadores y altaneros reclamando, ó mejor, exigiendo, la inmediata libertad de los compañeros Ricardo y Enrique Flores Magón, Librado Rivera y Anselmo L. Figueroa. En estos momentos solemnes en que los hombres se esconden, en que los hombres olvidan á los que se sacrifican por toda una raza, levantamos nuestra voz indignada contra el atentado salvaje del gobierno y la cobardía de los miserables que, ayer alentaron á nuestros hermanos á que se sacrificasen, y hoy que están en los calabozos del presidio no salen á su defensa, ya enviando dinero para que paguen abogados ó al menos para que REGENERACIÓN, nuestro querido periódico, no muera. ¡Cobardes: haced de ‘tripas corazón’ y mostraos altaneros una vez en vuestra vida! ¿No os da vergüenza que las mujeres os demos el ejemplo? ¿Qué hacéis, miserables esclavos, que no levantáis la voz para confundir con vuestras protestas á los verdugos del pueblo? Vuestra indiferencia en estos momentos es criminal. Si no lo hacéis así, ¡malditos seáis!” El manifiesto lo firma: Rosa González, Margarita Medina, Julia Ontiveros de García, Encarnación Santibáñez, Epifanía González, Rosa Méndez, Lucía Norman, María Brousse, Concepción Urdapilleta de Hernández, María del Toro, Julia P. Neyra, Amalia Rodríguez, Catalina Rodríguez, Estefanía Montero, Catalina Ramírez, Piedad Figueroa, Felicitas Andonaegui, Brígida Salazar de Tapia, Isabel Figueroa y Matilde García.” Al parecer a este grupo de mujeres se sumaron otras como Josefa Collins, Rosa Guadalupe Arellano, Margarita Zambrano Garza, Idelfonsa Pérez, Herlinda H. Cereceres, Micaela Arguello, Paz Rendón y Manuela Sarvide, quienes firmaban, junto con algunas de las primeras otras protestas, como “!Valiente justicia!”, que denunciaba la represión al grupo anarquista cubano que publicaba la revista Tierra de La Habana. En 1915 María, su hija Lucía, Ricardo y otros 33 liberales, entre los que estaban Librado Rivera y Enrique Flores Magón fundaron una granja-comuna en Edendale, California. La comuna terminó cuando Ricardo y Librado fueron nuevamente detenidos, acusados de “difamar” a Venustiano Carranza. Según Ricardo, María fue perseguida durante muchos años por la policía y fue arrestada el 25 de septiembre de 1916, acusada absurdamente de intento de robo de un par de calcetines en una tienda de Los Ángeles. La acusación se originó porque los detectives que la seguían creyeron que portaba documentos importantes en su bolso e inventaron el asunto del robo con la intención de confiscárselos y acusarla. Los cargos fueron retirados a los pocos días. El único texto firmado por María B. Magón publicado en Regeneración fue una “Protesta” aparecida en noviembre de 1916 en el que se acusaba a Luis Cabrera, representante de Venustiano Carranza, ante la conferencia de Atlantic City -en la que el gobierno carrancista gestionaba un empréstito norteamericano- de querer entregar el país a la burguesía norteamericana, además de solicitar expresamente a las autoridades norteamericanas la represión contra los miembros del PLM. En enero de 1917, María actuó en el papel de Rosa en el estreno del drama Tierra y Libertad, escrito por Ricardo. Poco después se dio la ruptura entre los hermanos Enrique y Ricardo. María, su hija Lucía y Raúl Palma continuaban al lado de Ricardo y Librado, quienes seguían editado Regeneración hasta su desaparición en marzo de 1918. El 12 julio de 1918, María Brousse y Epigmenio Zavala fueron acusados de conspiración, por el juez de Los Ángeles, Benjamín F. Bledsoe y el 19 de agosto del mismo año se le acusó, junto con Nicholas Zenn Zogg y Raúl Palma, de violar el Acta de Espionaje por ser miembros del Comité Internacional para la Defensa de Ricardo Flores Magón y Librado Rivera, y por haber enviado por correo cartas solicitando ayuda pecuniaria y solidaridad con los presos, en las cuales incluyeron el manifiesto de la JOPLM “A los miembros del Partido, a los anarquistas de todo el mundo y a los trabajadores en general” en el que se “burlan, rechazan y se encarnizan” con la forma de gobierno, los uniformes del ejército, la marina y la bandera de los Estados Unidos. Fueron arrestados el 13 de julio y puestos en libertad bajo caución el 13 de noviembre del mismo año. Tras la muerte de Ricardo y de su hija Lucía, María Brousse residió primero en Colima, más tarde en Michoacán y finalmente en una pequeña casa de adobe en Ensenada, adquirida con apoyo del general Lázaro Cárdenas. Hasta cuando sus fuerzas se lo permitieron, continuó difundiendo textos anarquistas. Murió en la pobreza en septiembre de 1946.

Mi hija, Lucía Norman2, que iba a hacerse cargo de la Sección Inglesa de Regeneración, se encuentra gravemente enferma como resultado de la terrible lucha que ha tenido que sostener en la empresa de libertar al camarada Raúl Palma de las garras del enemigo común.

Un temperamento nervioso como el suyo, no puede resistir tan dura tarea sin quebrantarse. El resultado ha sido la grave enfermedad nerviosa que la queja y por lo cual va a ser internada en el sanatorio del doctor Carl Schultz para su tratamiento.

Mis amigos comprenderán la difícil situación en que me encuentro: cargado de trabajo, −el trabajo inagotable e improductivo de la propaganda− y para colmo de pesares con mi hija que se encuentra en los lindes de la locura.

Alguna ayuda para que la enferma reciba su tratamiento médico, será bien apreciada.

 

Ricardo Flores Magón


1 Versión en ingles: To our English readers. My daughter Lucile Norman, who was going to take charge of the English Section of Regeneración, is now laying ill in bed, victim of a nervous strain on account of the imprisonment of our comrade Raul Palma. For such reason, Regeneración appears without English Section. We cannot say by when poor Lucile will be able to attend her work; her sickness is serious according to the opinion of doctor Carl Schultz who is attending her. Notwithstanding, we will procure another editor for the English Section, and we hope that our English readers will have something to read in our next issue. All contribution for the health of Lucile, will be gladly appreciated. Send all money and correspondence from now on to Ricardo Flores Magón, P. O. Box 1236, Los Angeles, Cal.

2 Lucía Norman. Los Ángeles, California (¿?-1923). Hija de María Brousse Talavera y de Martín Norman, quien murió ejecutado, según afirmó ella misma, al iniciarse la revolución mexicana. Al unirse su madre con Ricardo Flores Magón, este la adoptó como su hija. En 1911 Lucía participó en la discusión entre los editores de Regeneración y el dirigente del Partido Socialista Norteamericano Eugene Debs, con un texto sobre la pertinencia de la “acción directa” como arma del movimiento obrero. Participó activamente en la defensa de su padre adoptivo durante los juicios de 1912 y 1918. Formó parte del grupo de obreras residentes en Los Ángeles. Este grupo protestó en julio de 1911 por la aprensión de los hermanos Flores Magón, Anselmo I. Figueroa y Librado Rivera, y en septiembre del mismo año, por la represión que sufren los anarquistas cubanos Chacón, Vieytes y Saavedra, así como el periódico Tierra, por parte de los gobiernos de España y Cuba. En junio de 1916, durante una de las sesiones de juicio a Ricardo Flores Magón, Lucía Norman abofeteó a Peter Martin (Pedro Martínez), espía-agente del gobierno mexicano y testigo del fiscal. Destacó como participante en las protestas y motines que se desarrollaron tras la sentencia de un año cuatro meses de prisión en el penal de McNeil dictada contra los dirigentes del PLM. En 1916 Regeneración publicó algunos textos de carácter doctrinario escritos por Lucía, como “Todos somos iguales” en el que escribió: “Abramos los ojos. La Naturaleza nos ha hecho a todos iguales, tanto a los opresores como a los oprimidos. Sentimos y tenemos cerebro como los criminales que nos oprimen con los nombres de jueces, gobernantes, policías, burgueses y embaucadores, y así como ellos nos asesinan, tenemos el derecho de arrancarles la cabeza”. En ese mismo año, cuando Ricardo y Enrique Flores Magón vuelven a ser arrestados acusados de violación a las leyes de neutralidad, se niega el permiso a Ricardo para que su hija adoptiva lo visite en prisión. En los primeros días de junio, el fiscal Walton intentó infructuosamente que Lucía declare contra su padre y fue interrogada frente al jurado. Fue secretaria de la Workers International Defense League de Los Ángeles, que preside Edgcumb Pinchon. En 1917 Lucía estaba en el centro de los conflictos interpersonales que se desataron en la comuna de Silver Lake: Enrique Flores Magón, su esposa Teresa y otros integrantes del grupo exigieron a Ricardo que no defienda al simpatizante Raúl Palma, acusado de asesinato, por la relación amorosa que Palma mantenía con Lucía. Los conflictos terminaron con la separación, en 1918, de Enrique Flores Magón, su esposa Teresa, Trinidad García, Ralph García y José Flores del grupo editor de Regeneración. Quedarán Ricardo Flores Magón, Librado Rivera, María Brousse, Raúl Palma y Lucía Norman. Una severa crisis nerviosa, en 1918, le impidió que se hiciera cargo de la sección en inglés de Regeneración, como estaba planeado. Acompañó el cadáver de Ricardo Flores Magón desde Los Ángeles hasta la ciudad de México donde murió, en 1923, poco después de los funerales de Ricardo.

Los compañeros de Lehigh, Oklahoma, batalladores y entusiastas, han constituido un Grupo al que han dado el nombre de “El Único”.

En su primera reunión, dichos compañeros acordaron enviar a Regeneración la suma de $6.80 para mantener en pie este periódico.

Los compañeros del grupo “El Único” eligieron secretario al compañero Gumersindo Cervantes,1 de lo que tomaran nota los demás Grupos para establecer las relaciones que deben existir entre agrupaciones anarquistas para beneficio de la propaganda.

*          *          *

De Morenci, Ariz. Hemos recibido la siguiente comunicación:

“Con el nombre de ‘Voluntad’, queda formado en Morenci un Grupo libertario.

“Como la persecución que se está llevando a cabo en todas las naciones contra los trabajadores, y especialmente en esta nación, ha llegado al colmo; y habiéndonos desengañado de que los leaders rara vez hacen otra cosa que acobardar el espíritu de los trabajadores y atrofiar nuestras mentes con sus pláticas convenencieras, un grupo de trabajadores nos hemos propuesto seguir la máxima que dice: la emancipación de los trabajadores debe ser obra de los trabajadores, y esperamos que, aun cuando somos un pequeño número los que hoy reanudamos esta magna obra, nuestros compañeros de infortunio de este distrito, secundarán nuestra idea y nos agruparemos libremente, a fin de que los ignorantes aprendamos de los que saben más que nosotros, y los sabios orienten la mentalidad de los que la tienen atrofiada por los embaucadores de toda clase, de manera que cuando llegue ese cercano día de la liquidación social, no vayamos a defender esta patria o la otra, ni a derribar a un tirano para poner a otro en su lugar, sino a conquistar nuestra libertad, y a formar la patria  universal de los iguales y los libres, sin reyes ni fronteras.

“Para celebrar la inauguración de nuestro Grupo, ayer, primer día del año, tuvimos una gran fiesta libertaria. Pusimos en escena el instructivo drama social ‘Primero de Mayo’;2 simpáticas jóvenes, inflamaron el ambiente con cánticos libertarios, y compañeros de buena voluntad dirigieron la palabra al pueblo, haciéndole presente la gran lucha que el trabajador tiene entablada con el Capital.

“El producto de la fiesta fue dedicado a la prensa obrera y a los presos por cuestiones sociales. Las entradas fueron de $64.55 y los gastos ascendieron a $33.00, habiendo sido repartida la ganancia de la siguiente manera: Pro-presos de Chicago, $11.65; Tierra y Libertad, de Barcelona,3 $5.00; Germinal, $5.00; Cultura Obrera,4 $2.00; Regeneración, $4.00; Luz, $4.00.

“Con un fraternal saludo para todos, queda el Comité por el Grupo: A. Fernández,5 C. A. Barragán,6 M. Gutiérrez.

“Nota.- Se ruega a todos los periódicos obreros nos envíen un paquete de 5 ejemplares cada vez que aparezcan a esta dirección: Hermenegildo Ibarra,7 P. O. Box 1059, Morenci, Ariz”.

*          *          *

Un núcleo de compañeros residentes en Fresno, Cal., ha tomado los siguientes acuerdos:

“Estar en comunicación directa con el Partido Liberal Mexicano.

“Inaugurar sus tareas con algunos bailes para recaudar fondos.

“Obtener por conducto de Regeneración literatura sociológica.

“Estudiar los problemas que en este momento tiene enfrente la humanidad, para buscarles su solución.

“Este núcleo quiere hacer algo, aunque sea poco; pero quiere hacer algo. Este grupo, pequeño aún, desea apoyo moral y material del Partido Liberal Mexicano y demás organizaciones obreras, para llevar a cabo su obra de progreso.

“Fresno, California, enero 29 de1918.

“Toda correspondencia debe ser dirigida al compañero J. C. Madrigal, 1124 Tulare St., Fresno Cal.”

*          *          *

Los tres simpáticos organismos obreros que tenemos el gusto de anunciar, necesitan, naturalmente, el apoyo de todos los trabajadores, de todos los que sufren, para que su obra sea realizada.

Este es el momento, hermanos de cadenas, de operar una propaganda extensa e intensa de nuestros ideales anarquistas.

A imitar por todas partes el ejemplo de los compañeros de Morenci, Lehigh y Fresno, ¡a un lado la apatía! ¡Fuera modorra!

En estos tiempos, el que no eche a nadar, será aplastado. Está para operarse la gran transformación soñada por tantos años.

No nos durmamos, y ¡manos a la obra!

 

Ricardo Flores Magón


1 Gumersindo Cervantes. Minero. Residente de Oklahoma City y Leigh, Oklahoma. Miembro del PLM de 1912 a 1918. Conoció y trabajó a lado de Tomás Labrada Sarabia en Oklahoma City. Miembro del grupo “Libertad o Muerte” de Leigh (1912-1917) y del grupo “El Único,” de la misma población (1918).

2 Probable referencia “El Primero de Mayo” de Pietro Gori.

3 Refiérese a Tierra y Libertad  Madrid (1902-1906), Barcelona (1906-1923). Director fundador: Federico Urales (Juan Montseny). Redactores fundadores: Soledad Gustavo (Teresa Mañé), Fermín Salvochea, Federico Urales, Antonio Apolo y Julio Camba. Colaboradores: Tomás Herreros, José Grau, Vicente García, Abelardo Saavedra, Francisco González Sola, entre otros. Semanario anarquista de carácter doctrinario. A partir de 1906 fungió como portavoz y enlace de los grupos ácratas españoles. Desde 1907 se empezó a ocupar de la situación de México, manifestando su solidaridad con la causa del PLM. Durante 1910-1911, la difusión de la revolución mexicana, y la defensa de su carácter libertario, se convirtió en un elemento central de la agenda internacional del semanario. En marzo de 1911 abrió en sus columnas una suscripción a favor de los revolucionarios mexicanos, misma que cosechó resultados alentadores al menos hasta principios de 1912. A partir del inicio de la primera guerra se convirtió en depositario de la ortodoxia ideológica del anarquismo ibérico.

4 Cultura Obrera. “Órgano de la Unión de Fogoneros del Atlántico”. Nueva York, Estados Unidos (1911-1926). Director: Pedro Esteve. Colaboradores: Jaime Vidal, Ángel Ma. Dieppa, Marcelo Salinas, entre otros. Sustituyó a Cultura Proletaria, convirtiéndose en el más influyente periódico ácrata en español de la costa este de Estados Unidos. Colaboró estrechamente con la causa del PLM, recaudando fondos para el sostenimiento de Regeneración, organizando actos de propaganda y gestionando la solidaridad de agrupaciones anarquistas de España y América Latina.

5 A. Fernández. Minero (¿?) Gila Bend, Morenci, Arizona (1911-1918). Colaborador de Regeneración desde 1911, siete años después participaba en el Grupo Regeneración que operaba en Morenci, Arizona.

6 Refiérese a Carmen A. Barragán. Morenci, Arizona (1911-1918). Fundadora y vice-presidente del Grupo Regeneración Juan Sarabia, de Morenci, integrado exclusivamente por mujeres en marzo de 1911. En enero de 1916 reunió 75 firmas para protestar ante el presidente Wilson por la persecución que sufría el PLM. En marzo se adhirió al Programa de los Tres Puntos. En febrero de 1918 integró con A. Fernández, M. Gutiérrez y C. M. Gutiérrez el Grupo Libertario Voluntad de Morenci.

7 Hermenegildo Ibarra. Minero. Residente en Morenci, Arizona. Miembro del Partido Liberal Mexicano, al menos desde 1911.

Con el título de Verdugos y Víctimas1 tengo escrito un nuevo drama revolucionario en cuatro actos, en el cual describo la vida miserable de los trabajadores de las ciudades mexicanas donde domina la tiranía carrancista.

En este drama desfilan todas las víctimas del sistema capitalista, que Venustiano Carranza trata de perpetuar a toda costa en la infortunada región de México donde dominan sus sicarios. Allí está la joven pobre seducida por el burgués; allí se encuentra la prostitución arrancada de las filas populares para servir en el lupanar de carne de placer a nuestros señores; allí están los mendigos que llegaron a serlo por la injusticia del sistema; allí están los obreros pagando con el presidio y con la metralla su falta de previsión de no armar su brazo para reclamar su derecho; allí está el proletariado sufriendo en la cárcel por haber tomado de donde hay una migaja de los tesoros que ha producido y que el burgués se ha apropiado, y por encima de estas víctimas, allí están el burgués, el poderoso y el sacerdote, la autoridad, la celestina, el soldado, el legislador y el polizonte, corrompiendo, atropellando, explotando y celebrando en bacanales su fácil triunfo sobre los pueblos confiados.

En Verdugos y Víctimas, resalta la perfidia de los redentores y caudillos, que ofrecen para no cumplir, citándose con especialidad el caso del paro general que de manera tan brillante llevaron a cabo los obreros de la ciudad de México el 31 de julio de 1916,2 huelga que fue quebrada por el mismo bribón que al verse en aprietos en Veracruz, declaró que entonces comenzaba la Revolución Social atrayéndose de esa manera el elemento obrero de las ciudades, que dio su sangre generosa para encumbrar al que al día siguiente del triunfo pagaba con puntapiés los sacrificios de los humildes.

Estamos ansiosos por imprimir este nuevo drama; pero nos falta lo principal bajo este inicuo sistema: el dinero. Ciento cincuenta dólares se necesitan para la impresión, y excitamos a nuestros amigos a que contribuyan con lo que puedan, y a que hagan colectas para el objeto indicado.

Nosotros creemos que esta clase de literatura rinde grandes servicios a la propaganda del ideal anarquista, porque muchas personas a quienes se les hacen pesados los tratados serios, lee de buena gana un drama revolucionario.

Además, una vez impreso el nuevo drama, puede ser representado por cuadros dramáticos de aficionados, como ha sucedido con el drama Tierra y Libertad,3 que ha sido puesto en escena en distintos lugares de este país y de México, con grande beneficio para la propaganda.

Así, pues, compañeros, no dejéis de hacer todo lo posible para que Verdugos y Víctimas esté impreso pronto.

 

Ricardo Flores Magón


1 Verdugos y Víctimas fue escrita en los primeras semanas de 1918, el día del arresto de Ricardo Flores Magón y Librado Rivera, el 21 de marzo. El original quedó en la mesa de la cocina de la cabaña que ocupaba este último en Edendale y fue recogido al día siguiente por un amigo del grupo, José Alvires, quien a su vez lo entregó a José Ángel Hernández. Blas Lara Cáceres viajó a Tampico, Tamaulipas, desde la ciudad de México para recuperar el original. Con previa anuencia de Ricardo Flores Magón, fue publicada por vez primera, con ilustraciones de Nicolás Reveles, por la imprenta de Fernando Rodarte en la ciudad de México en 1922.

2 Refiérese a la última huelga convocada por la COM de la ciudad de México, seguida por cerca de 86,000 obreros. La huelga fue reprimida por el ejército a pedido de Venustiano Carranza, quien, al día siguiente emitió un decreto en el que ampliaba la “Ley Juárez” del 25 de enero de 1862 para castigar con la pena de muerte a los autores e instigadores de la suspensión del trabajo en las fábricas o empresas que prestaran servicios públicos, a quienes durante las huelgas destruyan o deterioren las propiedades de dichas empresas y a quienes instiguen tumultos o algaradas que tengan como fin hacer más intensiva y extensiva la suspensión arbitraria y violenta del trabajo. Los líderes de la huelga del 31 de julio fueron a prisión.

3 Ver “El drama Tierra y Libertad”, Regeneración, núm. 260, 6 de octubre de 1917.

El 5 de este mes falleció la compañera Leobarda Olivares,1 compañera de vida de nuestro querido camarada Margarito Olivares.2

Numerosísima como es la familia de nuestro compañero Margarito, este golpe no solamente ha lastimado los sentimientos de nuestro abnegado hermano, sino que lo ha sumido todavía más en la miseria. Ha tenido que hacer gastos en doctores, medicinas, tranvías y hasta para el entierro de su amable compañera.

Las condiciones en que queda la familia Olivares son fáciles de imaginar: lo que había para comprar pan, se ha gastado con motivo de la enfermedad y muerte de Leobarda.

¿Comprendéis, compañeros, la aflicción de nuestro camarada? Los chiquitines piden pan y abrigo, y el burgués dueño de la casa pide la renta; el tendero no quiere fiar más, y el lechero ha dejado de llevar las botellas de leche.

¿Dejaremos a este buen camarada solo en su infortunio?

No, hermanos, ¡a tender la mano a Margarito, que él ha sido siempre abnegado! ¡A ayudarle!

Margarito vive en 339 Hewitt St., en esta ciudad. A esa dirección pueden enviar su ayuda los que comprenden que el primer deber del rebelde debe ser la solidaridad.

 

Ricardo Flores Magón


1 Leobarda Olivares. Compañera de Margarito Olivares, miembro del Centro de Estudios Racionales de Los Ángeles. Falleció en febrero de 1918.

2 Margarito Olivares. Los Ángeles, California (1913-1918). Participó en las actividades del Centro de Estudios Racionales. Recibió los fondos para sostener la causa de Quirino Limón, cuando este fue encarcelado en junio de 1913. Suscribió el manifiesto “A los IWW” en el que se pedía a los trabajadores de esta organización que no secunden la postura la Rama Latina de la Local 602, que acusaba a los pelemistas de ser enemigos de los wobblies. En febrero de 1918 falleció su esposa Leobarda, quedándose a cargo de varios pequeños. Ricardo Flores Magón pidió ayuda para él a través de Regeneración. Participó en la campaña de defensa de Raúl Palma.

La burguesía se encuentra al borde del abismo, de un abismo ahondado con sus uñas rapaces, de un abismo ahondado todavía más a dentelladas de jabalí furioso.

La burguesía se encuentra al borde de un abismo, de un abismo profundo y negro abierto en siglos y siglos de opresión y de crimen.

La burguesía resbala hacia ese abismo en un suelo saturado de sangre y lágrimas, sangre y lágrimas que su crueldad ha hecho derramar.

En vano intenta afirmar su planta en un suelo hostil a la tiranía y fija la mirada en el horizonte oscuro con la esperanza de descubrir la mano nervuda que ha de impedir su irremediable caída.

No hay ancla de salvación en perspectiva, no hay una brizna de yerba a la cual asirse, no hay un hierro candente al alcance de la mano.

El derrumbamiento es fatal: un soplo airado, que es como el aliento colérico de toda una humanidad que sufre, la empuja a las tinieblas del abismo, del abismo profundo y negro abierto en siglos y siglos de opresión y crimen.

Es el soplo inexorable de las masas proletarias cansadas del yugo, ahítas de amargura, rebosantes de odio.

Es el soplo formidable de las oscuras falanges de la miseria, el aliento cálido de los desheredados que se resuelven ya a enarbolar sus andrajos como bandera de reivindicación y de represalia, como estandarte de justicia y de venganza.

La burguesía tiembla bajo un cielo en que se van apagando todos los soles de que le brindaban calor y le daban vida: Díaz desapareció; Nicolás, se desvaneció en las tinieblas; Huerta, se eclipsó; Kerensky es un astro errante y sin brillo; Carranza, se opaca; Wilson, pierde su lustre; Menocal,1 enlodado, chorrea fango; Alfonso, pierde el equilibrio, y para sostenerse siquiera por un instante, comete la estupidez de apoyar el pie en el cuelo proletario; Irigoyen, se hunde; Guillermo, condenado por la conciencia humana, bate furiosamente las alas en el lodo como un buitre herido.

¡Los soles se opacan! ¡Los soles se mueren!

En la noche cerrada, Poincaré parpadea como la luz de una linterna de ventorro, y Eduardo apenas brilla como la luz amarillenta de una cerilla.

Esta gran tragedia bien podría tener por título, La muerte de los Dioses2 o El Crepúsculo de los Ídolos.3

¡Y qué muerte y qué crepúsculo tan sin gloria y tan sin brillo!

Ya en el borde del abismo, la burguesía quiere jugar su última carta; no se resigna a morir; no pude renunciar a sus placeres y a sus privilegios sacados del sudor y de las lágrimas del pobre, sin dar las últimas dentelladas y los postreros zarpazos.

Y los zarpazos y las dentelladas se dirigen hoy contra Rusia, y un sol enorme, el Japón, se precipita a gran prisa sobre Siberia, con la esperanza de sofocar con su mole el incendio revolucionario, cuyo calor desentumece los miembros ateridos del proletariado universal.

Al calor de esa lumbre cobran ánimo los tímidos y los fuertes aspiran a pulmones amplios el ambiente saturado de rebeldía, señalando a las masas medrosas el resplandor que de Rusia se extiende por el orbe entero.

El terreno está abonado para la nueva cosecha: la emancipación proletaria.

El reinado de la burguesía está por terminar.

Nadie la ha matado: ¡se ha suicidado!

Un piadoso puntapié y desaparecerá en las tinieblas de su propia obra.

 

Ricardo Flores Magón


1 Refiérese a Mario García Menocal (1866-1941). Cubano. Ingeniero graduado en la Universidad de Cornell, Nueva York. Político conservador. En 1899 fue jefe de la policía de La Habana durante la intervención estadounidense. Ocupó la presidencia de la isla de 1913 a 1921, fracasó en el intento de reelegirse en 1924. Fraguó un golpe de estado fallido en 1931. Tras un periodo de exilio en los Estados Unidos, regresó a Cuba en 1940 al amparo del futuro dictador Fulgencio Batista, quien iniciaba en ese año su primer periodo presidencial.

2 Refiérese al libro de Dimitri Merejkowsky, La muerte de los Dioses (1895).

3 Refiérese al libro de Federico Nietzsche, El Crepúsculo de los Ídolos (1889).

Nikolai Lenine, el leader ruso, es en estos momentos la figura revolucionaria que brilla más en el caos de las condiciones existentes en todo el mundo, porque se halla al frente de un movimiento que tiene que provocar, quiéranlo o no lo quieran los engreídos con el sistema actual de explotación y de crimen, la gran revolución mundial que ya está llamando a las puertas de todos los pueblos; la gran revolución mundial que operará cambios importantísimos en el modo de convivir de los seres humanos. Las dimensiones de Regeneración, reducidas a dos pobres páginas nos forzan a no traducir todas las declaraciones de Lenine, y lo lamentamos, porque estas declaraciones, así como las del otro líder ruso, León Trotzky, arrojan fuerte luz sobre el movimiento revolucionario ruso.  Así, pues, allá va algo de lo que dice Lenine: “La revolución de Rusia no es una revolución nacional, sino que es una revolución mundial. “Los bolsheviki son los verdaderos internacionalistas.  Ellos son los únicos que desean ver extenderse por todo el mundo las ideas de la revolución. “Los bolsheviki comprendieron desde hace tiempo que la revolución, aunque de carácter político al principio, tiene que llegar a ser económica y social, y que este último carácter de ella nada tiene que ver con diferencias de raza ni de fronteras nacionales, y por lo tanto, el futuro de nuestra revolución tiene que ser internacional.  La revolución tiene que pasar sobre las fronteras y distinciones de raza, para aplastar las ideas opuestas a ella porque si queda confinada a un pueblo que adopte principios de paz y de igualdad económica y social, será sofocada por los estados capitalistas y autoritarios.” En seguida, explica Lenine que esto no quiere decir que los revolucionarios rusos van a llevar la guerra a los estados capitalistas, puesto que tal cosa equivaldría a negar los principios fundamentales de la revolución, que aboga por la fraternización de todos los pueblos de la tierra, y continúa de esta manera: “Es un absurdo pensar que la democracia internacionalista rusa pretenda alguna vez hacer la guerra a otros pueblos con el único fin de destruir monarquías extranjeras. Tal guerra estallaría sólo en el caso de, que los existentes gobiernos europeos conspirasen, como es posible que lo hagan, para aplastar nuestra revolución con el propósito de impedir que se extiendan sus dominios. “Nosotros continuaremos propagando nuestros ideales en todos los países para obtener este resultado: en primer lugar que la difusión de los ideales antimonárquicos y anticapitalistas precipite la terminación de la guerra. “Tal paz, sostenida por los pueblos insurreccionados, es el programa más deseable. “Incitamos también a la revolución a todos los países porque por su propia naturaleza la revolución rusa no puede permanecer aislada. “Las naciones deben ser organizadas ya sobre una base capitalista o bien, sobre una base proletaria anticapitalista. Los dos sistemas no pueden coexistir. Es imposible para Rusia existir sin bancos capitalistas e industriales, si ella tiene que tratar con países que todavía los tienen. “Lejos de aislarse Rusia del resto del mundo, debe entrar en más íntimas relaciones con él y como estas relaciones íntimas tienen que ser en su mayor parte relaciones fundadas en el intercambio de productos, es necesario que todos los países del mundo tengan un idéntico y homogéneo sistema económico. “Como la revolución rusa nunca restaurará el sistema capitalista, se hace necesario que nosotros luchemos por la difusión de las ideas anticapitalistas en el extranjero.”

*          *          *

Cuánto alientan las palabras de Lenine.  Ya no es la fraternidad universal un deseo sentido apenas por unos cuantos emancipados de prejuicios y errores de toda especie.  Este deseo va penetrando a la médula de los pueblos; este deseo se hace carne y sangre. Los sueños de los utopistas se confirman.  Los “sensatos” y “cabezas frías” ya no llamarán locos a los anarquistas. ¡Bendita mil veces la carnicería europea que está produciendo tan espléndidos resultados! En tres años y medio de barbarie capitalista, se ha logrado más de lo que se hubiera ganado en cien años con nuestra propaganda de fraternidad y de justicia. El viejo sistema se derrumba, hermanos de cadenas. ¡Ánimo! Que nadie flaquee en este momento en que se necesita que todos los que sufrimos los efectos de un sistema que nos aplasta, tengamos nuestras mentes preparadas para ver con serenidad lo que se acerca: la desaparición de todo lo que nos hace desgraciados: Autoridad, Capital y Clero.  

Ricardo Flores Magón

Otra vez sale a la luz pública este amado periódico, constando sólo de dos páginas.

Sin dinero y con la presión gubernamental encima, este periódico ni puede salir con regularidad, ni puede tener dimensiones mayores para contener abundante material de propaganda.

Pedimos a todos los que reciben este periódico que procuren hacer entender a las personas con quienes tratan, que es necesario tener en pie hojas como Regeneración, tan necesarias en este momento de la historia humana.

No pedimos imposibles: si cada trabajador que lee Regeneración procurase que dos, tres o más de sus amigos o conocidos cooperasen con cualquier cantidad para el sostenimiento de la publicación, este periódico saldría con regularidad.

¿Lo haréis así, hermanos de miseria y aflicciones?

Esperamos vuestra decisión.

 

Ricardo Flores Magón

Por fin, nuestro caso ha sido presentado a la Suprema  Corte para su revisión;1 pero esto no quiere decir que ya se haya reunido la suma necesaria para llevar el litigio hasta su trámite final.

Con algún dinero reunido, se dio el primer paso, el primer paso solamente, y se necesita con urgencia reunir fondos bastantes para todo el pleito, pues de lo contrario, en cualquier momento se nos arrestará y conducirá al presidio, porque ya se sabe que, sin dinero, no puede moverse la justicia burguesa.

Una carta de nuestro abogado Ryckman,2 fechada el 7 de este mes, nos informa que, si para el 7 de abril próximo no hemos reunido la cantidad que se necesita, tendremos que ingresar al presidio, pues no se nos quiere esperar más. ¡Nuestros amos tienen prisa de ponernos en el calabozo!

Así, pues, toca a nuestros amigos resolver el asunto. Nuestra libertad o nuestro cautiverio están en sus manos.

 

Ricardo Flores Magón


1 Ver “Nuestro proceso,” Regeneración, núm. 256, 21 de abril de 1917 y “La apelación” Regeneración, núm. 257, 23 de julio de 1917.

2 Refiérese a James H. Ryckman. Abogado de Ricardo Flores Magón y Librado Rivera durante el juicio de 1918. Interpuso un recurso ante la Corte de Apelaciones de San Francisco, California, el 6 de octubre de 1919, aduciendo que los cargos eran reiterativos y estaban fundados en un solo acto (la publicación del manifiesto del 16 de marzo) que en sí mismo no podía ser considerado una ofensa en contra de los Estados Unidos. La apelación fue desechada el 19 de noviembre. “Magón et al. v. United States, Circuit Court of Appeals, Ninth Circuit” , Federal Reporter, núm. 260: serie 1 (noviembre de 1919-enero de 1920).